Hice un viaje al futuro hace poco, tiré de la palanca de la máquina, pero solo avancé poco. Volví a jalar con más fuerza y la máquina se sacudió, me transportó y caí en un prado. Adelante mío había una estatua de esfinge gigantesca. Vi enormes edificios, luego fui a un río donde había una niña llamada Weena. Yo la salvé de ahogarse y nos hicimos grandes amigos.
En aquél lugar existían dos mundos, uno arriba y otro abajo. Arriba vivían los Eloi y la raza de abajo, los Morlocks, que servían a los Eloi solo para cuidarlos y luego comérselos.
Weena y yo íbamos por el bosque, cuando vimos varios Morlocks, ellos capturaron a mi amiga, que murió abandonada en la huída de los Morlocks después de que les di una paliza. Pensé que era mejor que morir entre sus dientes. Me había dado cuenta de que la máquina del tiempo se había perdido, pero logré encontrarla. Jalé la palanca con toda mi fuerza y me trasladé a un mundo rojizo donde solo había tierra y mar, pero me equivoqué lo que creí que eran rocas, eran cangrejos gigantes.
Volví a jalar y avancé unos meses más, las criaturas no estaban ya.
De nuevo jalé la palanca y me encontraba en un mundo donde nevaba y el sol se estaba apagando.
Finalmente pude volver a mi época, donde un medico examinó una flor del futuro que me había dado Weena.
La prensa vino a mi casa y le dije al reportero que me esperara media hora para volver a ese mundo con más pruebas. No han pasado media hora, sino tres años que el reportero sigue esperando.
Qué es lo que más me interesó: Me gustó el mensaje que percibo, si no cuidamos la Tierra, se volverá en contra nuestra.